COCEMFE Navarra

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Mujeres con discapacidad en riesgo de exclusión viven experiencias profesionales en la Universidad

Desde el inicio de esta colaboración entre Universidad de Navarra y Cocemfe Navarra, 50 personas han pasado por el centro y casi la mitad ha encontrado trabajo después

COCEMFE Navarra, Federación de asociaciones de personas con discapacidad física y orgánica, y TANTAKA- Universidad de Navarra han entregado los correspondientes diplomas a siete mujeres con discapacidad en situación de exclusión que han vivido experiencias profesionales en distintos servicios de la Universidad.

El acto ha tenido lugar en el Edificio Central de la Universidad, con la presencia de Tomás Gómez-Acebo, vicerrector de Alumnos, Natalia Couto, coordinadora de TANTAKA e Ikerne Arizkuren, coordinadora de AVANZA Navarra, servicio de empleo de COCEMFE, quienes han destacado “el espíritu de superación” de las participantes, así como el trabajo realizado durante estos meses.

“En un año tan complicado como este, que una universidad confíe en ellas no sólo supone un empujón laboral, sino sobre todo un estímulo personal para seguir superándose día a día”, ha destacado Arizkuren. Por su parte, Gómez-Acebo ha calificado la experiencia como “una oportunidad para trabajar en un ambiente acogedor que facilita la futura integración e inclusión laboral de las personas con discapacidad”.

Desde el inicio de esta colaboración, 50 personas han pasado por la Universidad y casi la mitad ha encontrado trabajo inmediatamente después, una valoración “muy positiva” para COCEMFE Navarra teniendo en cuenta “el entorno laboral actual y la situación personal” de las personas usuarias, generalmente mujeres con discapacidad de edad avanzada, con desempleo de larga duración, escasa formación o carencia de ingresos.

Esta iniciativa forma parte de ‘Discapacidad e inclusión sociolaboral’, un programa de COCEMFE Navarra que tiene el objetivo de atender los casos de personas con discapacidad con mayores dificultades y combatir la presencia de situaciones de exclusión en este colectivo, mayor con la llegada del COVID. “La crisis ha hecho mella en los grupos sociales más vulnerables y este año nos hemos encontrado con un incremento de casos de personas con discapacidad al borde de la pobreza”, explica Arizkuren.

Financiado por el Departamento de Derechos Sociales, el programa ha atendido este año 25 personas con discapacidad, 172 personas desde su inicio en 2010, con un trabajo coordinado por parte de COCEMFE en ámbitos como el empleo, el empoderamiento o la autonomía para lograr su incorporación laboral, potenciar sus capacidades y fomentar su participación.

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